EDÉN
Me enseñaste
Que todo está prohibido
Porque todo tienta,
Voz reptante.
Y estos ojos vacíos
Y este dolor en llamas
Y esta envenenada condena
No eran tu Caos.
Me abriste
Cuando me hablaste las palabras malditas
En un jardín donde las flores
Nacen de muertos.
Los cantos ya no alcanzan.
Y por Dios
Que en este Limbo
Te libero.
Comentarios
Publicar un comentario